Barrio de Sant Antoni – Mercado de Sant Antoni

El barrio de Sant Antoni tiene su origen en el convento de Sant Antoni Abat, construido en el siglo XV junto a la muralla de Barcelona.

En este barrio se encuentra el mercado más impresionante de Barcelona por la calidad del diseño, la estructura y los elementos decorativos, que lo convierten en el mejor ejemplo de arquitectura de hierro de la ciudad.

En los últimos años, alrededor del mercado han aparecido muchas nuevas tiendas, bares y locales de ocio, que lo han situado como uno de los distritos con más vida de Barcelona.

Los domingos, el mercado de Sant Antoni cambia de cara y da paso al mundo del coleccionismo: allí puedes encontrar libros de segunda mano, cómics, videojuegos, CDs y vinilos, álbumes, sellos, etc.

El mercado es una imponente construcción de hierro, construida entre 1879 y 1882, inspirada en los edificios de las Halles de París. Desde sus inicios, reunió tres mercados en uno: alimentario, Encants y dominical.

La superficie del mercado ocupa toda una manzana del Eixample y está estructurado mediante cuatro cuerpos que forman una cruz sobre las diagonales del cuadrado de la manzana. En la intersección de las cuatro naves destaca un elemento octogonal a modo de cimborrio que sobresale por encima del tejado.

En 2007, el mercado se cerró para su renovación integral a cargo de los arquitectos Pere Joan Ravetllat, Carme Ribas y Olga Schmid. Tras la reforma, se ganó mucha superficie y se recuperaron los antiguos patios interiores como plazas públicas.

¿Cómo llegar al barrio de Sant Antoni?

El barrio de Sant Antoni está delimitado por la Gran Vía de las Cortes Catalanas (desde plaza de España hasta plaza de la Universidad), la Ronda de Sant Antoni, la Ronda Sant Pau y la avenida del Paralelo. Puedes explorarlo fácilmente desde la parada Plaza de España de la Ruta Roja del Barcelona Bus Turístic.

Si quieres ir directamente al mercado de Sant Antoni, te recomendamos bajar en la parada Sant Antoni de la Ruta Azul.

Para los más curiosos

• El hierro forjado del mercado fue construido en los talleres de la Maquinista Terrestre y Marítima.
• Durante las obras de remodelación, se encontró el baluarte de Sant Antoni, uno de los 11 que tenía la muralla medieval, una masía agrícola del siglo XVI e incluso un tramo de vía romana, que se mostrarán en zonas museísticas incorporadas al proyecto de restauración.
• El piso inferior del mercado es una de las zonas abiertas de la ciudad donde los jóvenes practican diferentes disciplinas de danza urbana.